El agua de piscinas requiere un tratamiento periódico para poder disfrutarla con la máxima grantía y seguridad, pero para saber como tratar, primero hay que saber qué deterioro ha podido sufrir a lo largo del tiempo de uso. Un análisis de agua de piscina es una excelente herramienta para ello.
¿Porqué es importante realizar un análisis?
Tras la temporada de verano, época propia del uso de piscinas, es muy recomendable analizar y tratar el agua de nuestra piscina para evitar que se deteriore y tenerla lista para la próxima temporada de uso.
Las condiciones climáticas y el continuo uso son causa de una serie de problemas que harán que no podamos disfrutar de nuestra piscina, en las condiciones de salubridad y seguridad adecuadas.
Algunas de estas afecciones son, por ejemplo, Turbidez, Ojos rojos o piel seca, Color verdoso o Mal olor.

Turbidez
Cuando el agua de la piscina está turbia, puede deberse a factores como un pH alto, un exceso de residuos orgánicos o a que el filtro no está funcionando adecuadamente. En los dos primeros casos sería necesario analizar el agua para averiguar su pH y la concentración de cloro.
Color verdoso
El color verdoso en el agua de nuestra piscina se debe principalmente a la aparición de algas. Las algas aparecen debido a unos niveles de pH bajos, o lo que es lo mismo, a un agua ácida. La acidez del agua provoca corrosión y esta corrosión provoca la aparición de determinados metales que son la causa de la aparición de algas. Por ello, es vital ir analizando el agua de nuestra piscina para tener controlado el pH.
Ojos rojo/Piel seca
La irritación de los ojos cuando los abrimos bajo el agua es un síntoma normal debido al contenido en cloro de la misma, sin embargo, cuando advertimos estos dos síntomas de manera acusada puede deberse a que los niveles de pH del agua están lejos de ser neutros. Una primera medida sería analizar el agua para averiguar su pH y actuar en consecuencia.
Mal olor
El mal olor suele estar producido por las cloramidas o cloro combinado lo que no implica un exceso de cloro total en la misma. Estas moléculas de cloro combinado se producen cuando se unen moléculas de cloro residual libre con residuos orgánicos como saliva o sudor, produciendo cloro combinado y generando mal olor. En AGQ brindamos información completa sobre el cloro en nuestros análsis, muy útiles para evitar de antemano que nuestra piscina huela.

¿Qué medimos en un análisis de agua de piscina?
La ley establece una serie de parámetros a analizar para garantizar la calidad y seguridad de las piscinas. En AGQ Labs analizamos dichos parámetros según el Real Decreto 742/2013, de 27 de septiembre, por el que se establecen los criterios técnico-sanitarios de las piscinas y Decreto 485/2019, de 4 de junio, por el que se aprueba el Reglamento Técnico-Sanitario de las Piscinas en Andalucía.
Estos parámetros son: La turbidez, el cloro total, el cloro residual libre, el cloro combinado y el pH, parámetros de los cuales ya hemos hablado anterior mente de lo que pueden producir y de porqué es importante mantenerlos controlados.
Además, en los análisis realizados por AGQ Labs, indicamos también el recuento de pseudomonas aeruginosas y el recuento de escherichia coli, bacterias que pueden estar presentes en el agua de nuestra piscina pudiendo producir afecciones típicas como la otitis.
Es por ello que, analizar el agua de nuestras piscinas, no solo nos asegura que vayamos a disfrutar de ellas con la calidad y seguridad necesarias, si no que, en caso de encontrar anomalías, podremos actuar a tiempo.